Habitación infantil de estilo crema que irradia encanto infantil a través de su color y diseño. El cálido color madera del roble Dieying Ya, como caramelo derretido, emite un halo suave, combinado con una base de color blanco hielo puro, suave como la crema, creando una atmósfera cálida. El verde oliva la embellece, inyectando vitalidad al espacio, como un brote de primavera, rompiendo la monotonía. La chapa de roble en capas se utiliza para el fondo de la mesita de noche y algunos armarios, como si introdujera la atmósfera de un bosque en el interior, aportando una textura natural. El armario y el escritorio en blanco hielo son sencillos y elegantes, y cumplen las funciones de almacenamiento y aprendizaje. La singular silla verde oliva estimula la curiosidad de los niños con una postura animada. La ropa de cama y las cortinas incorporan elementos de la misma paleta de colores, aportando vitalidad y energía. La cama tiene líneas redondeadas para garantizar la seguridad de los niños.
Los interesantes cuadros colgados en la pared aportan un toque artístico al espacio. Toda la habitación infantil presenta una paleta de colores armoniosa y unificada, que combina practicidad y estética, convirtiéndola en un pequeño mundo ideal para que los niños crezcan felices y exploren con libertad.